El parque automovilístico en 2035: más grande, pero más envejecido
José Luis Gata (Solera) destaca las oportunidades y desafíos del mercado posventa de cara al futuro
El parque automovilístico español seguirá creciendo hasta 2035, pero lo hará con un parque cada vez más envejecido. Esta es una de las principales conclusiones del informe “La posventa (in)sostenible”, presentado por José Luis Gata, director de la división de Posventa de Solera, en el marco del evento IBIS Iberia 2025.
Según las estimaciones de Gata, en 2035 circularán en España casi 36 millones de vehículos, entre cinco y seis millones más que en la actualidad. Sin embargo, la edad media de los vehículos también aumentará: el 50 % del parque tendrá más de 15 años, frente al 47 % actual, si se mantienen los ritmos actuales de matriculaciones y achatarramientos. “Vamos a facturar más recambio y habrá más reparaciones, pero ¿la posventa será sostenible?”, se cuestionó Gata.
¿Hacia una posventa menos sostenible?
La sostenibilidad, según explicó Gata, no solo se refiere al respeto al medio ambiente, sino también a la viabilidad económica a largo plazo para las empresas del sector. En este sentido, el experto señaló algunos retos importantes, especialmente en la reparación de carrocería. “Ya se está notando una reducción en los golpes frontales, debido a los sistemas ADAS que incorporan los vehículos modernos”, indicó. A cambio, los costes de reparación se incrementan por la complejidad de los componentes como faros, paragolpes o puertas, que contienen más piezas y tecnología.
El parque actual: más diésel que eléctrico
Aunque el coche eléctrico acapara titulares, la realidad actual es bien distinta. “En España, el vehículo eléctrico apenas representa el 0,8 % del parque automovilístico, y en Portugal el 2 %”, afirmó Gata. “Tenemos tres millones más de habitantes por la inmigración, lo que contribuye al crecimiento del parque, aunque sea más antiguo”.
Un dato clave que destacó es que el 91 % del parque está en manos de particulares, lo que, a su juicio, garantiza el modelo de posventa independiente. “El cliente corporativo suele presionar más los márgenes, así que es importante que el parque siga estando mayoritariamente en manos de particulares”, apuntó.
¿Qué papel juegan las marcas asiáticas?
Respecto a la presencia de vehículos asiáticos, especialmente los chinos, Gata mostró una visión más conservadora. “Las marcas chinas tendrán su parte del mercado, pero les costará mucho tiempo competir con los fabricantes europeos, que representan el 80 % del parque y de la facturación en posventa”, dijo. Como ejemplo, señaló que las marcas coreanas, presentes en España desde hace más de 30 años, actualmente apenas representan el 6 % del parque y de la facturación.
El valor del recambio eco
Gata puso en valor el recambio de desguace como una opción clave para alargar la vida útil de los vehículos más antiguos. “En una reparación de carrocería, el recambio supone un 58 % del total de la factura; en mecánica, llega al 70 %”, recordó. “Cada año se achatarran 90.000 vehículos en España por pérdida total, pero muchos de ellos podrían repararse con piezas de desguace. Esto supondría un incremento de 600 millones de euros para el sector posventa”.
No obstante, algunos expertos del sector apuntan que alternativas como segundas marcas OEM o recambios chinos pueden competir en precio y calidad, sin necesidad de recurrir a piezas de segunda mano. Además, para que el recambio de desguace sea realmente competitivo, los proveedores deberían invertir en catalogación, garantía y logística, lo que podría encarecer su precio.
Sea como fuere, el debate sobre la sostenibilidad del modelo posventa está servido. Y con un parque más numeroso, pero más viejo, la industria deberá adaptarse para seguir siendo rentable y eficiente.